Cierra los ojos e imagina un entorno idílico mediterráneo donde te gustaría pasar el resto de tu vida. Seguramente imagines una preciosa y enorme casa blanca situada a primera línea del mar, sin vecinos ni nada a su alrededor que te moleste; perfectamente decorada y amueblada por dentro, con mobiliario de lujo y con todo tipo de detalles de lo más cuidado. Seguro que en esta casa hay un gran jardín y miles de árboles y de flores; huele a hierba fresca, a hortensias y a jazmín. Y, por supuesto, no puede faltar una piscina donde bañarte sin que nadie te vea o te moleste. Y a poder ser que sea una piscina infinita y que no sepas donde acaba la piscina y donde empieza el mar.
A veces los sueños se hacen realidad. Como en Casa del Mar, una masía de ensueño. Un lugar mágico con el que todos hemos soñado alguna vez. Y es que a pocos km de Barcelona encontramos este lugar único donde celebrar uno de los momentos más especiales de tu vida: tu boda.
Como os podéis imaginar, en este espacio todo luce. Pero nuestro mobiliario preferido es el blanco, la madera y el mimbre porque le dan ese toque marinero, ese aire fresco propio del mediterráneo. En este caso eligieron también unas guirnaldas de luces que le daban ambiente de verbena y al caer la noche la magia aún se hacía más evidente.
Si queréis casaros frente al mar, esta casa es el paraíso